NACIONES UNIDAS

¡Boinas fuera! Llega Arora Akanksha.

Ella afirma:

“Solamente 29 céntimos de cada dólar de los ingresos anuales de la ONU van a los objetivos que esta organización tiene la obligación de atender. En consecuencia, el 71% de los ingresos (aprox 39.700 millones/año) los consume la propia estructura”.

“La ONU es un organismo esclerótico, malbaratador y paternalista que decepciona a las personas a las que tendría que ayudar”.

“La ONU invierte sus recursos en la celebración de conferencias y la redacción de informes que mayoritariamente son actividades frívolas únicamente publicitaria. Ha perdido el rumbo para el que fue creada y de lo que se supone, habría de hacer”.

Esta es, básicamente, la línea argumental de esta joven funcionaria de la organización que, 14 días antes del 8M, ha presentado su candidatura a la Secretaría General de las Naciones Unidas y quiere disputar a Antonio Guterres, actual Secretario General, su renovación en dicho cargo.

De los aspectos económicos de la ONU alguna cosa sabe, porque en 2016 fue contratada para ayudar a mejorar los controles financieros internos.

“Si las Naciones Unidas fueran una empresa privada ya habría sucumbido a sus competidores”.

"Por fuera es una organización increíble por su grandeza y objetivos, pero no hay coherencia para hacer las cosas”.

Nadie apuesta por su victoria, pero tampoco nadie la subestima. Si, contra pronóstico, ganara la Secretaría General, ¿Quién sería su propuesta para dirigir la IMO?

                                                                                                                                       MERCANTE