CÓMO HA DE SER UN CAPITÁN

CÓMO HA DE SER UN CAPITÁN

Me han pedido que dé mi opinión sobre que debería ser un capitán de barco, empiezo por avisar que yo estuve navegando desde el 1975 hasta el 1980, con lo que mi opinión quizás ya esté trasnochada y no sea útil.

En esos tiempos, navegué como “familiar acompañante” desde que me casé hasta que mi hijo nació. La compañía naviera era Marasia y para mí fue un descubrimiento maravilloso, ignorado por la mayoría de la población de Barcelona.

En mi primer viaje, embarque en la M/N PACIFICO, salimos de Barcelona hacia Lisboa y después paramos en el puerto de Colón, que es la puerta del canal de Panamá, para hacer combustible y provisiones y seguimos viaje hacia América del sur por el océano Pacífico con el canal de Panamá como atracción principal. Cuando olvimos y nuestro primer puerto de llegada a Europa era Villagarcía de Arosa, pero embarrancamos a la entrada de la ria, fue entonces cuando me dí cuenta de la responsabilidad que tenía un capitán, fue el último viaje del buque Pacífico y de Rufino, su capitán.

Después navegué con muchos capitanes, de todo tipo y, es difícil decir cómo debe ser un capitán, pero lo voy a intentar: debe emanar respeto, pero no exigirlo, tener empatía, pero saber ejercer la autoridad cuando es necesario. He navegado con capitanes que después han sido amigos y otros, a los que temía cuando debíamos embarcarnos en su barco, porque sabía que su presencia haría difícil la convivencia durante el viaje.

Debe ser coherente, considero que tiene que dejar las cosas claras, el principio del viaje. No creo que sea fácil, su responsabilidad es abrumadora. Conoces de verdad como es un capitán cuando hay un problema a bordo, de sus decisiones dependen en gran medida las vidas y la integridad de la carga y el barco pero, también la confianza de la tripulación y por tanto de su respuesta en la adversidad.

Perdonad que ahora, al cabo de tantos años, me atreva a dar mi opinión, navegué en los tiempos en que un familiar acompañante no debía opinar sobre barcos, política, mujeres o cualquier otra cosa que fuera polémica. Tampoco era fácil navegar de familiar acompañante.

                                                                                                                                      MARISA RONCHERA